Después de que la protagonista bese al chico; se cojan de la mano y echen a andar por la playa, aparecen lo créditos. Se le agradece a mil y una personas todo el trabajo hecho y puesto para realizar la película; de esas que le gustan a cualquiera de lo emocionantemente perfectas que son. Aunque toda esa gente no se da cuenta de lo que en realidad ha creado. Tras la caída del telón, se encuentra un mundo entero, con todos sus habitantes y una historia inacabada. Una protagonista que, sin guión, marcha por su propia película sin rumbo, descubriendo las ventajas de una libertad indeseada... Pero la libertad deja de serlo muy rápido para convertirse un terrible monstruo que se vuelve contra ella, desprovista de suerte insospechada o fuerzas increíbles que la salven. La chica comienza a vivir una vida que no quiere; una vida llena de inseguridades y tropiezos en el camino para la que nunca nadie la preparó. Desquiciada por la impresión provocada por todo lo nuevo que se le abalanza ...