Ir al contenido principal

El Día de los Arcángeles.

 Las luces se reflejan desde tu sombra. Es más de lo que pensaba que podía existir. Te mueves por la habitación, como si respirar fuera fácil. [..] Y el fin llega demasiado rápido; como si soñara con ángeles. 
 - The xx
Que acabe el día y caigan las horas como una muralla de papel tras de él. No hace ruido. Toca el suelo en un balanceo desagradable de ver; pero al caer solo levanta aire.

Algo que se destruye, crea también.
Cuanto tiempo más podré tardar en entender el significado completo de eso.

El viento que se levanta aquí es helado. Te estremece y devuelve tu mente al calor de tu cama. De casa. Te hace caminar abrazándote los brazos y encogida durante segundos por el cambio de temperatura. 

Pero llegar y ponerse los zapatos peludos no tiene precio. Igual que no lo tiene ponerse el pantalón de dibujos y acariciar la taza de té. La luz aquí dentro es preciosa de noche; pero cuando sale el sol, el brillo enamora ahí fuera.

Te enfrentas al mundo porque amanece bonito, porque huele a café cuando sales, porque hoy te toca llevar falda. Te enfrentas porque vas escuchando música, porque llegas y te encanta ese lugar y el incandescente de vez en cuando. Porque quieres que vean como eres de verdad. Luchadora. Porque llevas todo el día enfrentándote al más pequeño de los retos. Te enfrentas porque llegas y todo sigue en el mismo lugar donde lo dejaste. Te enfrentas al mundo porque estás sola.

Aquello de <<No eres consciente de todo lo que tienes hasta que lo pierdes>> se convierte en una de las mayores verdades que conoces. Y en una de las más reales. Todos los sentimientos aquí son más fuertes. Echas de menos como no pensabas que se podía; las ganas de llorar se convierten en conocidas, la felicidad te abruma, la trsiteza inunda, la curiosidad mata por dentro y la pereza te condena.

Pero a la vez, todo lo sientes más lejos. Se paraliza todo de golpe y tras un par de semanas notas la rueda empezar a girar. Pero todo va muy lento, es pesado, te entumece, hace que mires con ojos entreabiertos, como si nacieras de nuevo.


Teminó el Día de los Arcángeles y no has estado en casa. Diría casi, que es la primera vez que no has estado en casa; solo que hasta ahora no te habías dado cuenta nunca antes. Nunca te había importado. Pero ahora; ahora que estás lejos se te forma un nudo en el estómago por no haber estado ahí para compartirlo.

Por aprender a ser tú de nuevo.


Photo by Me. All Rights Reserved.

Comentarios

Entradas populares de este blog

Tokyo.

Como sí la sensación fuera insólita y única; así es como se siente. Repetir la misma historia pensando que algo cambiará . Me da igual que es distinto o siquiera si lo hay. Soy completamente feliz al sentir eso de nuevo. Al sentir que algo estalla si lo escuchas nombrar; ponerte a pensar y sorprenderte analizando cada segundo recordándolo. Aún así no es eso lo que más me alegra, lo que más me despierta. Es ver que sigo viva por dentro, saber que todavía me queda algo de ilusión que derrochar por una causa distinta a aquello que me hizo librar silenciosas guerras en mi interior y escalar montañas que sólo yo podía ver; que hizo pensar y sufrir a más de uno, aún con miles de kilómetros de por medio. Y que ahora visto con ojos bien poco objetivos, tanto me costó y tan poco me devolvió . No estoy segura de si mereció la pena y tampoco lo estoy de que lo siguiente si la valga; pero no me cuesta ver que quiero salir de aquí como sea, porque si lo bueno de esos días tan grises vestidos de ros

Beta-Sheet.

No estoy segura de esta es la forma correcta. Si ése es el título que debe llevar. No sé si esto me libera ya. Si consigo algo así. Pero más me vale intentarlo. -------------- Hace mucho mucho tiempo, me olvidé de ser. Me olvidé de sentir para mí. De cómo hacer que las cosas salgan de dentro. Hace mucho tiempo. Empecé a moverme con el viento, siguiendo el calendario. Parando a lo largo de la carretera para evadir el momento en el que me iba a romper. Porque sabía que ocurriría tarde o temprano. De un lado a otro sin importar el camino, y en cierto modo a sabiendas de que al llegar tampoco me importaba el destino. Soñando con el mañana, porque era el día en que depositar mis esperanzas. No sé cuando fue la última vez que algo llego tan adentro que fui incapaz de no sentirlo. La última vez en que mis sentimientos me inundaron sin avisar y llenaron todo. Aquí huele bien. No es nada mágico, es el perfume de la vela a mi derecha. Estoy de nuevo tumbada aquí, en el lugar en el que

NewborN

Es tiempo sin tumbarme frente a la hoja en blanco y la barrita parpadeante. Pero esque también es tiempo vacío. Tiempo perdido. Tiempo estancada, trabada, sin avanzar ni un paso y sin atreverme a retroceder. Es tiempo dolida y decepcionada. Por rachas. A veces creo que ese tiempo me ha ayudado a olvidar; no, que digo, a llevarlo mejor. Y es que podría estar mucho peor. Lo recuerdo mucho peor. Podría sentirme derrotada, sin apoyo ni agarre o algo en lo que creer. Dios, si no estuviera ella moriría. No es eso ahora. Sólo estoy quieta; inmóvil, intentando no perder demasiada energía para no pasarlo peor, y demasiado asustada al parecer, para enfrentarme a un riesgo que no me reporta seguridad. Me cansa verme hablar de lo mismo una y otra vez, demostrárme que nada es distinto ni parece querer cambiar. Que seguiré sintiéndome sóla entre la multitud; evitando todo sentido literario, porque la horrible verdad es que lo estoy. Que me hace falta algo más para re-aprender a vivir y que mi c