Un día más perdido en el presente. Sus pensamientos, aprisionados en el pasado, buscando un camino para llegar al futuro. Porque está confundida, anclada, y tiene que vivir el presente. No sabe que quiere. Ni ayer, ni hoy, ni mañana. Revive ese pasado intentando adivinar que pasará mañana. Cree comprender el presente, sin haberlo vivido; sin conocer el peligro que esconde el futuro. La llave está en lo pasado. El código se vive, se siente y se llora ahora. Esa voz en su cabeza, una más de las miles que se oyen allí, le avisa del peligro, la libra de su prisión, encuentra su camino. Pero todo es inútil. Enseguida ha cambiado. Lo que hagas es presente. El presente es ahora. Ése "ahora" ya ha pasado, es historia en tu futuro. No la escucha, no la siente, no la vive, no la llora. Esa voz en su cabeza, una más de las miles que se oyen allí, se está apagando. Ya la deja sin camino, la aprisiona, la deja en peligro. Sirvió antes como escudo; la deja ahora ante la fier...